Las tragaperras mecánicas y electrónicas poseen una característica básica llamada ‘tambores’. La cantidad de ellos varía entre juego y juego. Los tambores poseen símbolos que se combinan. Cuando el jugador hace girar los tambores, estos se detienen formando combinaciones aleatorias y luego arrojan los pagos.
Para los veteranos esto es algo ya conocido, como también el hecho de que la posibilidad de ganar dinero depende de la cantidad de tambores que tenga la tragaperras e igualmente de la cantidad de símbolos que haya en cada tambor. La cantidad más común de tambores en las tragaperras está entre tres y cinco. Por lo general, las tragamonedas con tres tambores suelen tener veinte símbolos por tambor.